Ross cuenta con Viggo Mortensen en el papel principal, una garantía, como así fue, de buena actuación. Es altamente probable que se acuerden de él cuando empiece la temporada de premios.
En los aspectos técnicos de la película hay poco que decir, todo impecable. Cada día es más difícil conseguirse una película mal hecha. La parte floja suele ser el guión con historias mal contadas o poco interesantes. En este caso la historia está bien contada -salvo un giro un poco extraño al final- y es, hasta cierto punto, interesante. Un análisis de cómo sería criar un montón de niños en una montaña, alejados de la sociedad y con una extricta instrucción académica y física.
Por su puesto, no pude dejar de mirar con ojo crítico el enfoque socialista, el endiosamiento de Chomsky y la crítica abierta al capitalismo. Sin embargo, la película termina de la misma forma que terminan todas las aventuras comunistas, con el fracaso del plan. En esto me recordó un poco a la película Into The Wild. Así que, después de todo no está mal, simplemente toca esperar que el espectador lo interprete así y no se quede sólo con la parte romántica del asunto. Estados Unidos no tiene un sistema perfecto, pero las alternativas que se suelen plantear son mucho peores y la gente tiene libertad, hasta cierto punto, de hacer las cosas como le parezca más conveniente sin necesidad de llegar a extremos.
Para finalizar, me gustó que tocaran Sweet Child O'Mine. Buena elección.
Más info en imdb y wikipedia.
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